Una teoría revelada por Harold Bloom nos informa del apophrades, recurso del arte poética que sugiere «el regreso de los muertos» mayormente como penates. Desde el título de esta obra se establece un juego con un par de versos perdurables de Carlos Pellicer. Por lo demás, ya en el primer poema del libro se nos advierte del tono y las tramas fraguadas en Aquí no suceden rosas:
Admonición
Generoso lector apelo a tu indulgencia no hay hueso que roer Hilvanarás tu aguja a la luz de mi estrella si consientes zurcir sólo gastadas sílabas
Nació en Macuspana, Tabasco en 1968. Desde hace poco más de dos décadas vive en Nuevo Laredo, Tamaulipas. De 2013 a la fecha se ha desempeñado en el servicio público, como Director de Arte y Cultura y como Director de Espacios Literarios del citado municipio tamaulipeco. A lo largo de los años ha coordinado numerosos Círculos de Lectura en su localidad; no menos importante, ha estado al frente de la Biblioteca "Octavio Paz" de Nuevo Laredo desde su fundación, en 2015. Aquí no suceden rosas es su primer poemario.